miércoles, 30 de abril de 2008




La globalización está produciendo efectos transformadores en la actual sociedad. Esta nueva realidad se va imponiendo a pasos agigantados, y en muchos aspectos algunos, como es mi caso desconocemos en su mayor parte.


Desde que me he conectado a Internet -de esto hace pocos meses-, se me hizo cada vez más necesario intentar entender este tema sobre la "globalización".

Estudiando y profundizando sobre ello, me planteé la siguiente pregunta: ¿estaremos abocados inevitablemente a un choque de civilizaciones, tal y como anunciaba Huntington?.

Lo que está claro es que somos seres históricos; lo que sabemos, lo que nos transmiten nuestros padres, nuestros maestros, son experiencias compartidas.

Es difícil cambiar el código de señales que nos sirve para orientarnos lleva el transcurso de muchas generaciones. El cambio de la sociedad agraría a la industrial, por ejemplo tardó dos siglos en producirse, a pesar de que se perciba como algo veloz e intenso.

La conformación de la sociedad industrial, todavía no ha alcanzado a amplias zonas del mundo.
Sin embargo, actualmente estamos contemplando el paso vertiginoso -en una generación- de la sociedad industrial a una que aún desconocemos.

Percibimos que actualmente carecemos de guía en este código de la globalización. Sabemos, que lo que era no será, pero no nos hacemos una idea de lo que podrá ser.

Es evidente que ha habido otras revoluciones a lo largo de la historia, pero es la primera vez que nos encontramos con la comunicación entre los seres humanos de cualquier rincón del planeta en tiempo real. Está claro, que esta forma de comunicarse cambia las relaciones entre los hombres y mujeres.

A modo de conclusión diré que por más que analizo -y seguiré analizando- esta cuestión aún no he encontrado ninguna respuesta hacia donde puede abocar a la humanidad la llamada "aldea global", porque aun existe una gran incertidumbre.